La conexión entre la ropa y la mente, ¿cómo vestirte afecta tu estado de ánimo y bienestar?
La moda está estrechamente ligada a la psicología humana.
La forma en que nos vestimos tiene un impacto significativo en nuestra autoestima, confianza y en cómo nos perciben los demás.
En este artículo, exploraremos la psicología de la moda y cómo influye en nuestra mente.
Nuestra personalidad en el vestuario
La moda es una forma de autoexpresión. La ropa que elegimos usar puede decir mucho sobre nuestra personalidad, gustos y valores. Nos permite mostrar al mundo quiénes somos y cómo queremos ser percibidos.
Al vestirnos de cierta manera, construimos una identidad visual que puede comunicar poder, creatividad, sofisticación o cualquier otra cualidad que deseemos proyectar.
Además, la ropa también puede influir en nuestra propia percepción, es decir, en cómo nos vemos a nosotros mismos. Cuando nos vestimos con prendas que nos hacen sentir bien y cómodos, aumentamos nuestra confianza y autoestima. Por otro lado, si usamos ropa que no nos gusta o que no se ajusta a nuestra imagen deseada, es probable que nos sintamos incómodos y menos seguros de nosotros mismos.
Simplificar la vestimenta hace bien a la cabeza
Uno de los últimos artículos de la revista Elle hace referencia a que mundialmente se está visibilizando un rebrote del “armario cápsula”. Esto se produce porque, principalmente las mujeres, estamos necesitando volver a pensar en prendas simples que nos liberen de la fatiga de elegir cada día un atuendo diferente y resolver fórmulas de combinaciones exitosas.
En la publicación se menciona el problema que acarrea el “exceso de elección”, es decir, cómo contar con un guardarropa saturado de ropa termina abrumando a la persona al momento de vestirse.
Un dato curioso es que solo en enero de este año, las búsquedas de “armario cápsula” realizadas en internet aumentaron un 178%.
Esto indica que hay un creciente interés en la simplificación y la organización del guardarropa mediante prendas versátiles y de calidad que se pueden combinar de diferentes formas, lo que facilita la elección diaria de la ropa y fomenta un consumo más consciente.
Shiv Roy como inspiración
El personaje de Siobhan Roy (Shiv Roy) de la exitosísima serie Succession, se posicionó como un ejemplo de simplificación del guardarropa.
El estilo de Shiv mantiene un estilo de vestimenta de sastrería clásica y tonos neutros que utiliza como armadura con la que lucha para que su familia la tome en serio.
Su vestuario carece de creatividad, colores y estampados, viste siempre de la misma manera, como si tuviera una fórmula de atuendo muy específica. Y cuando se ha visto obligada a hacer presencia en un entorno machista de hombres con poder, siempre ha recurrido al impecable traje negro.
¿Cómo se ve esto trasladado a la realidad y la no ficción?
Sucede que Google ha arrojado un aumento significativo en el número de mujeres que buscan el estilo y los conjuntos de #ShivRoy.
Analistas de la moda, indican que este fenómeno se debe al retorno de la fatiga de la decisión de vestuario para el trabajo diario. Es decir, la búsqueda de una fórmula que resuelva nuestra vestimenta cotidiana. Deseamos proyectar una imagen específica y esta fórmula nos ayuda a lograrlo. Por eso, el personaje de Shiv Roy ha logrado eso: una fórmula que le permite transmitir fuerza y presencia, y tratar de destacar en un entorno empresarial, corporativo y político completamente masculino y machista.
Con ella se ha vuelto a la idea de la “cápsula”, una receta o un uniforme, como solución, y es precisamente por eso que la propuesta de vestuario de este personaje ha sido exitosa.
Según Google Trends, las búsquedas de “trajes de Shiv Roy”, el personaje de la exitosa serie Succesion, han experimentado un aumento del 300 % en los últimos cinco años.
¿Qué pasa con las tendencias?
Sabemos que la moda impulsa constantemente nuevas tendencias y estilos, y muchos consumidores se sienten atraídos por la novedad y la idea de estar a la vanguardia de lo que se considera “in”. Sin embargo, seguir las tendencias puede ser una experiencia contradictoria desde el punto de vista psicológico.
Por un lado, estar a la moda puede generar un sentido de pertenencia y aceptación social porque nos volvemos parte del “todo”. Sin embargo, también puede generarnos preocupación y ansiedad por hacernos sentir que no encajamos si no estamos al día con lo que se considera popular.
En relación a las tendencias, la periodista internacional de moda, Libby Page dice:
“En los últimos años nos dimos cuenta de que los consumidores se alejaron de los artículos basados en tendencias y se pasaron a productos más atemporales. Todavía hay apetito por la novedad, y las tendencias seguirán surgiendo, sin embargo, esto se contrarrestará con la inversión en prendas atemporales y versátiles que se puedan usar y conservar en los años venideros.”
Con la información que te comparto en este artículo, te animo a que las decisiones que tomes relacionadas con tu imagen sean respetuosas con tu bienestar personal, porque tu salud emocional y física son prioridades fundamentales.
Si querés saber más sobre armario cápsula, podés leer este artículo de mi blog donde te cuento cómo puede ayudarte a ahorrar tiempo y dinero a la hora de vestirte.
¡Hasta la próxima!
María
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